7 de setembre de 2007

Discurs del president de la Generalitat a les festes patronals d’Iznájar

Buenas noches, alcaldesa, autoridades, hermanos de la Cofradía de la Virgen de la Piedad, estimados paisanos,

Ha pasado un año desde que tuve el honor de ser pregonero de las Fiestas, y debo confesaros que el recuerdo todavía me emociona. Fue para mí un día inolvidable, de los que agitan el corazón al evocarlos. Aquel día pude sentir el calor de vuestra acogida, la simpatía y las muestras de franca amistad en todas vuestras manifestaciones.

No puedo olvidar las sinceras y emotivas palabras, con las que Isabel, vuestra alcaldesa, me recibía en el salón de plenos del Ayuntamiento, dándome la bienvenida y agradeciéndome el haber mantenido sólidas mis raíces iznajeñas.

Tampoco olvidaré la generosidad de la Corporación Municipal al otorgarme la distinción de compartir la galería de ilustres iznajeños del Salón de Actos, al lado del gran periodista, político y en varias ocasiones Ministro, Julio Burell; dedicándome además el nuevo paseo público en que habéis transformado la carretera de Valdearenas.

Me invitasteis a ser pregonero cuando era Ministro de Industria, Comercio y Turismo y como tal, fue motivo de profundo orgullo el recibir vuestras distinciones.

Os aseguro que pondré todo mi empeño en seguir ganándome ese honor.

Pero en aquella fecha también vine como candidato aspirante a la Presidencia de la Generalitat, y vuestras muestras de simpatía me hicieron salir de aquí con energías renovadas y un firme propósito, volver como Presidente de la Generalitat de Catalunya.

Hoy, nada me satisface más que poder cumplir aquel compromiso celebrándolo con vosotros.

La responsabilidad al frente del nuevo cargo que ocupo la afronto con entusiasmo, como adolescente andaluz ayer, agradecido a la generosa tierra que me acogió – Cataluña-, y como catalán hoy, orgulloso de mi origen andaluz.

Desde que despertó mi conciencia social y sumé a mis propósitos el compromiso político, son ya muchas las veces que me he sometido a las urnas en Catalunya, recibiendo una vez tras otra la confianza de sus gentes.

Pero debo deciros que nunca hasta ahora, otorgándome la Presidencia de la Generalitat, se había revelado de manera tan clara, la mentalidad abierta, fraternal e inclusiva del pueblo catalán.

Tened siempre presente que el interés de unos pocos en hacer crecer los prejuicios y las desavenencias entre los pueblos, no confunde a los ciudadanos honestos y solidarios que somos la mayoría.

Cataluña es tierra de acogida, como lo es Andalucía y el conjunto de España. La emigración no quiere nada más que una oportunidad para vivir una vida digna y trazar un futuro con esperanza. A cambio, ofrece sus manos, su propia vida y su riqueza humana. Aceptar esa riqueza humana en su diversidad es beneficiarse de un hecho positivo. Como lo es reconocer la variedad plurinacional de nuestros territorios.

Nuestra sociedad está viviendo profundos cambios de manera muy rápida, nuevas estructuras familiares, nuevos entornos laborales y de comunicación, flujos continuos de distintas culturas y un mercado para el consumo cada vez mayor.

El reto está en saber adaptarnos a estos cambios, construyendo una sociedad transversal y versátil que articule un buen futuro respetando nuestras tradiciones y nuestro patrimonio.

En estas mismas fechas, hace un año, teníais pendiente de aprobación vuestro nuevo Estatuto de Autonomía. Hoy quiero felicitaros por haber conseguido dar este gran paso.

El Estatuto es una herramienta imprescindible para profundizar en el autogobierno, y su desarrollo ha de agilizar la gestión de las prioridades de Andalucía y repercutir beneficiosamente en todo su territorio.

Vuestro Estatuto también recoge –como el de Cataluña- el afianzamiento de la cultura propia a través del conocimiento, la investigación y la difusión del patrimonio histórico, antropológico y lingüístico. Pensad que ningún instrumento es más efectivo para mejorar la armonía entre los pueblos que el conocimiento. En este sentido, Iznájar ya lleva recorrido un largo camino de superación y logros. Ahora el futuro está en vuestras manos.

Hoy es un día de fiesta, hoy comienzan las Fiestas Patronales de Iznájar y una vez más, como manda la tradición, se da el honor de hacer el pregón a un hijo predilecto de este pueblo.

Y a mí, me honra hacer la presentación del pregonero de este año: Paco Pavón López. Ya os avanzo que esta vez habéis escogido a un auténtico pregonero, un maestro en el arte de la expresión verbal, de la retórica, de la escena y de la creatividad teatral.

Paco Pavón es un orgullo para nuestro pueblo, no solo por ser un gran artista y un reputado pedagogo en el ámbito de la dramaturgia y la cultura andaluza, sino y en especial por haber mantenido vivas sus raíces iznajeñas.

Paco es el director y creador de la compañía de Teatro “La Carpa” con la que ha recogido numerosos reconocimientos a lo largo de toda su extensa y fructífera trayectoria. También ha obtenido grandes éxitos y se le guarda reconocimiento como gestor, programador y director del Teatro del Carmen de Vélez-Málaga.

Paco vivió los mejores años de su vida en Iznájar, esos en los que reinan la esperanza y los sueños. Y fue aquí donde se le despertó el gusanillo del teatro, con las obras que ponía en escena en los períodos estivales.

Creo que merece especial mención su papel en la obra “La Mordaza”, que dirigió D. Antonio Ginés. Seguro que todavía hoy muchos lo recuerdan.

Él fue promotor del Club Juvenil La Colmena, que constituía un intento de dinamizar actividades para la juventud más inquieta. Pero las actividades del Club chocaban a menudo con los postulados de Don Serafín, el cura de la Parroquia, que tenía la potestad de censurar aquello que a su buen parecer se salía de las normas entonces vigentes.

Paco pertenece a una de estas largas familias iznajeñas que dan para recrear miles de historias. No me cabe duda que a pesar de no haber vivido de forma permanente en el pueblo, sus estancias vacacionales en su casa de la calle Real han enriquecido su creatividad y su imaginación en más de un relato y alguna puesta en escena.

Como he dicho al principio de su presentación, este año habéis escogido a un hijo predilecto de este pueblo que es un auténtico pregonero, un artista de larga experiencia, a la vez que un reconocido creador y un virtuoso del verbo.

Por todo ello, no quiero dilatar más la espera del placer que sin duda nos deparará escucharlo. Os deseo a todos unas muy felices Fiestas Patronales y

¡Viva la Virgen de la Piedad!